¿Qué
tipo de líder quieres ser... Tú decides
CPC Francisco Sanjinez Calderón
Consultores Auditores Calderón & Asociados SRL.
En
EE UU se realizó un estudio sobre la obra de mayor impacto después de la biblia, resultado que le dio el
triunfo a la filosofa del Objetivismo de Ayn Rand, con la Obra Rebelión de Atlas, Asimismo esta
escritora ha publicado una serie de ensayos, como El nuevo Intelectual, obra
que hace un análisis de los tipos de líderes que compiten dentro de una
sociedad: El bárbaro, El hechicero y El intelectual.
En
el Líder
Bárbaro, su mayor fortaleza reside en la fuerza y domina por medio del
miedo, manteniendo a los hombres bajo una constante amenaza de destrucción, el
bárbaro es un resentido extrovertido, su
técnica para lograr sus objetivos es el miedo, el bárbaro como cualquier matón
y como muchos animales, sólo se siente confiado cuando huelen el temor en sus
adversarios, su mayor preocupación es que la sociedad deje de temerle, produciéndoles
una actitud de frustración.
Por otro lado, el bárbaro casi o nunca piensa en crear, su objetivo es apoderarse de algo,
el saqueo, pillaje material es su única meta, terminando en convertirse en «el dueño de lo ajeno», no tiene
propósito, ni plan, ni sistema para imponerse a lo que ha conquistado,
tampoco tiene ética y valores, sus placeres están más próximos a tener una filosofía «Eurípida», dedicados a complacer sus deseos: comida, bebida, un palacio, pompa suntuosa, sexo indiscriminado,
certámenes de proeza física, juegos de azar, actividades todas, que no le demande mucho y no
involucran el uso del nivel conceptual de conciencia.
El Líder Hechicero reside su poder en
el hecho de que el hombre necesita un visión integrada, una filosofía y por ignorancia, cobardía o pereza mental los barbaros piensan que la filosofía del hechicero es la verdadera.
El miedo del bárbaro a la realidad es tan grande, que está dispuesto a entregar su conciencia a aquél que le ofrezca protección y vida cómoda, no es capaz de luchar ni de crear con su propio esfuerzo, espera
que el hechicero puede darle lo que a él le falta y de esta manera se necesitan el uno al otro ya que el
hechicero piensa que el bárbaro puede ahorrarle la necesidad de la acción, del golpe, del enfrentamiento.
El hechicero se siente superior dentro de los barbaros, generalmente
utiliza el leguaje de los charlatanes, promete soluciones rápidas, tiene la cura para todo problema: falta de trabajo, salud, poder, etc; el hechicero es un «embustero» dice o hace lo que
quieres escuchar.
El Líder
intelectual tiene a su cargo la aplicación de los principios
filosóficos en cada campo del esfuerzo humano. Establece el curso de la
sociedad transmitiendo ideas, desde el profesor universitario, el escritor, el
artista, el periodista, el político, el productor de
películas, el cantante de club nocturno, entre otros. Las profesiones
específicas de los intelectuales están en el
campo de las ciencias que estudia el hombre, las denominadas humanidades y se
explaya en todas las ciencias. Los intelectuales son los ojos, los oídos y voz
de una sociedad libre, una sociedad libre tiene que ser una sociedad informada.
Cuando más especializada y heterogénea es una
sociedad, mayor es su necesidad del poder integrador del conocimiento, una
sociedad libre tiene que contar con la honradez de sus intelectuales: éstos deben
de ser eficientes, confiables, precisos y objetivos.
Cualquier hombre que trabaja y produce sabe lo
que está haciendo, puede funcionar a un nivel totalmente
humano, los productores e intelectuales, hasta aquí, han sido olvidados de la historia. Con la
excepción de algunos breves periodos, no han sido los
lideres o los guías
de las sociedades humanas, pero han influido en su progreso y bienestar. La
mayoría de las sociedades han sido lideradas regidas
por lo bárbaros
y los hechiceros; por otro lado en sociedades regidas por «intelectuales», por ejemplo la Inglaterra del Siglo XVIII que
trajo consigo la Gran Revolución
Industrial; bajo esta perspectiva es momento de evaluar puntualmente cada tipo
de líder y a sacar sus propias conclusiones, de tal
manera que las propuestas coadyuven a alcanzar el desarrollo que nuestra
sociedad requiere.

No hay comentarios:
Publicar un comentario